Crónica de Mil Mentes.
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Hola, holita... Hoy traigo a este blog algo más personal, algo que no es que necesite contar, pero sí me sentiré mucho mejor cuando lo haga.
Como estoy seguro que ya sabes, manejo dos blogs a la vez, mientras estudio a duras penas un examen al que pronto me presentaré. A la vez, escribo también la que va a ser mi futura novela, eso mientras encuentro algún hueco para hacer deporte, y también descanso viendo vídeos en Yutub, viendo películas y jugando a videojuegos. También tengo vida social, aunque claramente menos que hace un año, porque la vida no me da lo suficiente.
Aun así, voy a dejar de lado todas estas cosas, salvo a ¡Muy Rocambolesco! y a Crónica de Mil Mentes, y la simbiosis que forman entre ambos. Este es un blog de opinión, pequeño, amateur y, qué quieres que te diga, lo adoro. No solo llena mi necesidad constante de opinar, sino que consigue a veces una visión crítica que yo mismo, ni tenía planeada, ni he visto en alguna parte. Recuerdo el vídeo que le dediqué a Logan Paul, que puedes ver aquí, en el que pensaba destrozarle, pero al final, de forma completamente inesperada, acabé sintiendo pena por él. Ni siquiera en el artículo sobre el feminismo tenía pensado argumentar tanto y proponer soluciones, en principio solo quería soltar mierda.
Y esta es para mí la magia de este blog. Yo empiezo a escribir y no sé cómo voy a acabar, no tengo nada planeado, tan solo sé que quiero cubrir uno o dos temas, y acabo hablando de tres o cuatro, y lo único que está más o menos medido son las reseñas. Es un formato que apenas me consume cabeza, porque puedo hablar y hablar igual que si hablara en la realidad, pero moviendo los dedos. Aunque me consume un tiempo brutal... brutal.
Sí, en la Crónica sale sangre, no como en Marvel.
Por el otro lado, tenemos la Crónica de Mil Mentes, una novela llevada a cabo a capítulo por semana. Quien entienda, sabrá que no es una novela como tal, sino más bien un borrador, porque al tener pensado el final, pero no haberlo escrito, puedo cometer fallos en los primeros capítulos. Sinceramente, te recomiendo mucho este blog, porque le dedico muchísimas horas, de verdad, muchísimas, y pienso a diario en cómo estructurar la historia y los personajes para que disfrutes cada capítulo lo máximo posible.
La Crónica me tiene agotado, amigui. Hoy mismo me siento muy suelto escribiendo, de hecho, estoy aquí contándote esto y casi diría que estoy descansando, pero la Crónica me consume, tanto que apenas llego para traer una escena semanal de mi futura novela, apenas 8 páginas, mientras que en la Crónica son 15 de media. Claro, como una vez publico la entrada no puedo hacer cambios significativos, me exprimo mucho el coco para que todo salga bien, para que todas las historias paralelas vayan coordinadas, y todos los personajes tengan la máxima profundidad que la historia me deja.
Y ahora mismo, en una entrada que debería publicar hoy, llevo una cara y ya estoy cansado. Y no sé si podré cumplir los plazos, simple y llanamente porque mi cabeza tiene un límite. No estoy quemado de la Crónica, ¿sabes? No lo pienso dejar, ni muchísimo menos. Pero agota.
Deja que te cuente un secreto.
A partir de junio del 2017, despertó en mí una pasión por escribir que no había existido antes. Sí, me gustaba, se me daba bien, pero apenas escribía... y eso cambió. Comencé a escribir textos, románticos, extraños, policíacos, épico-cómicos, e incluso escribí uno erótico que guardo porque pretendo enviarlo a concurso.
En agosto, estaba tan motivado y tan en la cresta de la ola, y se avecinaba tanto tiempo libre, que decidí retomar la Crónica, y por si acaso era poco, también apareció en septiembre la idea de llevar un hermano pequeño, llamado ¡Muy Rocambolesco!
¡Genial! Uno consume mucho tiempo, y el otro (que también consume), me agota. Sin embargo, el tiempo que me ocupa Rocambolesco es tiempo que descanso, mientras que la mayoría de mis recursos se los dedico a la Crónica. Y a su vez, la Crónica rompe la monotonía de Rocambolesco, obligándome a escribir al cien por cien de mi nivel, obligándome a ir al máximo incluso cuando estoy agotado, una rutina que me está haciendo crecer, y que, encima, hace que Rocambolesco sea aún mejor y más divertido, porque en lugar de ser lo único, es la escritura fácil, la agradable, la que me sirve para descansar mientras escribo el siguiente capítulo de Luchadora y compañía.
Ambos blogs forman un tándem acojonante en este, mi año de crecimiento literario más grande.
Quiero hablarte un poco sobre la Crónica.
Siento un profundo amor hacia los personajes de Crónica de Mil Mentes, sobre todo hacia Luchadora, porque es el personaje más personal que he creado en mi vida. Una vez, mirando hacia dentro, me imaginé cómo sería mi mundo interior, mi santuario, y me imaginé quién podría ser su guardián, alguien que fuera perfecto para ese mundo, como si fuera parte de él.
Me imaginé a una mujer de metro sesenta, de pelo azul oscuro y ojos color violeta. Esa mujer fue la guardiana de mi mundo, algo así como un ángel de la guarda mental, un escudo imaginario que me ayudaba a afrontar los problemas del día a día, porque imaginaba a esa mujer luchando literalmente contra los problemas, y yo quería verla ganar.
Esa mujer es Luchadora, y la adoro. No es mi personaje mejor diseñado en términos técnicos de funcionalidad, pero sin duda está rodeada por un halo de cariño que procuro que lo compense (yo creo que sobradamente). Es una chica fuerte y testaruda, que no tiene poderes, y se maneja con su habilidad con las armas cuerpo a cuerpo, su espada negra de acero irrompible, y su voluntad inquebrantable. Ella es el brazo ejecutor de las mentes, que son los personajes de mi historia, partes de la personalidad de un humano... pero está destinada a algo más grande.
La idea de varios entes que representen la personalidad de un individuo no la cogí de 'Del Revés', como pudiera parecer, porque yo ya había empezado a escribir esa historia cuando la película aún estaba en desarrollo. En realidad, tuve dos inspiraciones: 'Osmosis Jones', película que trata sobre un glóbulo blanco que quiere detener a un virus, y 'Spy Kids 3'. SÍ, LA PUTA SPY KIDS TRES. Esa película es horrible de cojones, pero el villano tiene una escena en la que conversa con sus desdobles de personalidad... y claro, en mi cabeza sumé uno más uno.
Un gran villano, creo yo.
Sever, antiguo villano.
Me gustan los malos que no son malos porque sí, sino que tienen razones detrás. Sever, el villano de la primera historia de la Crónica, era malo malísimo, y sin embargo, al final se revelaría que en el pasado fue bueno, y absorbió dentro de sí todo el mal del mundo para que el mundo no fuera destruido.
En esta tercera temporada, por la cual puedes empezar sin problema (está diseñada para que puedas comenzar sin haber leído lo anterior), he diseñado no un villano, sino tres, de los cuales solo desarrollaré dos, de momento. Sobre todo hay uno, el principal, que es tan letal como humano... un villano que, en el fondo, solo quiere cariño.
¿De qué va?
¡Unucba Nachuza!
Las mentes viven en paz, en su gran isla, alejadas de las otras islas hostiles, liderando a Mentes en su día a día, con su trabajo, su mujer y su hijo. No tienen ni idea de que, más allá del mar, Miedo está organizando un plan, no para matarlas, sino para acabar con su esencia, y todo lo que representan. Luchadora será la que haga que todo suceda demasiado deprisa, sin saberlo...
Más que una historia de buenos contra malos, esta historia es una de personajes. ¡No sabes el cariño que le he cogido a las nuevas incorporaciones! Madurez, Energía e Imica (sobre todo Imica) son grandes fichajes que demuestran que estoy cogiendo experiencia en la escritura, y personajes re-hechos, como Stille, Susurro, Dante o Afrodita, están destinados a dar mucha guerra.
¿Qué quieres que te diga? Hablo de ellos porque siento gran amor por lo que escribo y por quien lo vive. ¿Te pica el gusanillo? Aquí tienes la lista de la tercera temporada, por orden, la cual espero que te guste.
¡Por supuesto que no es Hemingway o Kafka! No solo es un borrador, sino que a mí me falta mucho para ser lo que sé que puedo ser. ¡Anda que no hay cosas que podría mejorar! Pero creo que, pese a eso, lo que escribo tiene una calidad razonable, lo hago por amor al arte, y sobre todo, con mucho cariño.
¿Qué pasará en el futuro?
Quizá la cuarta dé más miedo, pero la tercera temporada será, de lejos, la más dura de todas.
No pienso dejar apartada la Crónica, por más agotado que esté. Lo que sí que te pido es que, de ahora en adelante, tengas paciencia si alguna semana no puedo publicar capítulo. Siempre será por motivos de peso, y siempre lo intentaré, porque por eso me comprometí. Hoy habrá capítulo, aunque sea de madrugada.
Pero ten paciencia... ¡que a veces dar el 100% no es suficiente! Gracias por quedarte hasta el final en esta entrada completamente improvisada y desestructurada. Su objetivo final no era más que hacer que descanse hablando bien sobre aquello que tanto me cuesta hacer, a ver si ahora cojo el capítulo con más ganas. Un besito muy sincero.
¡Ah, por cierto! La temporada va a durar unos 40 capítulos aprox, y he diseñado y coordinado el final... y va a molar muchísimo. ¡Tengo una barbaridad de ganas de que puedas leerlo!