Sobre la cancelación a personas o marcas:

Últimamente a Rowling se la tiene en el punto de mira, y cualquier cosa que haga o diga está mal. Se la quiere cancelar y la peña quiere dejar de comprar cosas de Hogwarts. Esta puta costumbre está muy de moda y va más allá de Rowling, ¿y sabes qué?

Que los que hacen eso son unos críos.

Que dejen de creerse guays por no comprar el Hogwarts Legacy, porque aunque así jodan a Rowling, están jodiendo todavía más a una desarrolladora que sólo quiere trabajar y dedicarse a su pasión. Y si los de la desarrolladora explotan a sus trabajadores, o si Rowling hace con su fortuna reuniones sectarias de ricachones pedófilos, NO ES NUESTRO PROBLEMA. NO LO SABEMOS. QUE DEJEN DE INTENTAR CONTROLARLO TODO, PORQUE CADA CUAL PUEDE PENSAR COMO A ÉL LE DÉ LA GANA, Y SI TE GUSTA EL PUTO VIDEOJUEGO, CÓMPRALO.

No somos perfectos, nadie lo va a ser, y cuantos más haya por el mundo queriendo serlo, más gilipollas (ellos) habrá sueltos. Que van aquí de divos morales y de integración y de visibilidad a las minorías. ¿Ellos quieren cambio? Sorpresa: ellos odian el cambio. Aquellos que aman el cambio lo dejan madurar y se morirán sabiendo que sus hijos, quizá, puedan ver ese cambio. Los que lo odian sólo quieren ver las cosas diferentes porque odian el presente, y critican y destruyen y cancelan, en lugar de construir.

Por favor, no censures. Yo no compro absolutamente nada que pueda dar dinero a Electronic Arts, y no por ello voy alimentando hashtags ni señalando a gente con el dedo. No. Simplemente no me apetece darles mi dinero, no se lo doy, y ni me siento mejor, ni me siento peor sabiendo que EA es una de las empresas más potentes del mundo. Y los que le den su dinero, bien por ellos, no creo ni que sean malas personas, ni que estén fomentando la mala industria.

Nada más que decir. Quien tenga que reflexionar, que reflexione, si es que va a hacerlo. Por mi parte, en unas horas os voy a traer un taller de escritura chulísimo. ¡Un besi de fresi!