Los héroes de la DANA.

Lo dijo Zoo hace 10 años en su canción Corbelles: el pueblo salva al pueblo de esos putos mierdas. Los políticos son una mierda, sí, pero también los grandes empresarios y los pequeños empresarios que querrían ser grandes, una realidad que muchos que votan a la derecha no quieren ver. Sobre la sociopatía de estos mierdas de los que hablaba quizás debiéramos explayarnos otro día, pero sí, quédate con la palabra: sociopatía. Imagínatelos como un psicópata, pero ligeramente más suave. Cuando una persona con carácter egoísta y apático ha sido empujada, bien por traumas o por educación, todavía más hacia la apatía, desarrolla una anti-humanidad en la que los bienes humanos no importan y sólo les vale el éxito, económico o mediático.

Hace casi dos semanas al pueblo valenciano lo arrasó una DANA que dejó las pedanías al sur de Valencia hechas una pocilga. Un trozo del Mediterráneo se alzó sobre la provincia y cayó el equivalente de año y medio de agua sobre el oeste de la ciudad, destrozando Utiel y arrastrando una ola de agua mezclada con barro, troncos, piedras y miles de hojas. Ni siquiera llovió en el centro de la ciudad, pero toda esa agua que viajaba al mar arrasó con todo. Un viento infernal levantó huracanes. Miles de personas, que volvían del trabajo a su casa en coche, se vieron obligados a abandonar el vehículo.

El resto ya se ha podido ver en televisión y sobre todo en redes... el cementerio de coches, muebles y mierda taponando las calles, gente que no podía salir de sus casas, y casas con butrones provocados por el agua o los coches que arrastraba. Yo he podido verlo en persona y da igual lo que hayas visto en pantallas: vivirlo es mucho más sobrecogedor, sobre todo cuando tocas la realidad de aquéllos que lo han perdido todo. Las fotos no le hacen justicia, de hecho, las fotos que voy a poner no son ni fuertes, no me apetece hacer chascarrillos y estoy al borde de las lágrimas habiéndome presentado en la ciudad 4 días después de la catástrofe, donde los vecinos pudieron procesar gran parte de la mierda, y créeme, sin contar las cosas que sólo las máquinas pueden apartar, procesaron todo muy rápido, pese a la inmundicia y el olor. Pese al medio metro de lodo, o el metro ochenta de tierra que había entrado en los edificios cercanos a la carretera. Y, sobre todo, pese a los cadáveres y objetos personales que había en ellos. De todos, sólo un edificio de los que ayudé a limpiar estaba sin procesar, y ver lo que vi, que tampoco fue mucho, todavía me horroriza. Imagínate a sus vecinos, que lo vivieron todo.

La historia de la DANA es también una historia política, y no hablo sobre la incompetencia del PP y trasladarla como excusa para criticar al partido entero, que incompetentes sabemos que son, sino de los puros actos que han transcurrido alrededor de los hechos. Vamos a lo crudo y real: Mazón, el President, conocía las alertas de la AEMET y sabía perfectamente que había subido el riesgo, pero o bien por incompetencia o por beneficiar a los empresarios, no anuló la jornada laboral y no avisó a la población. ¿Qué crees que pasó? Que la mayoría de los más de 200 que murieron lo hicieron por no saber lo que se venía. A las 13h, Mazón anunció que las lluvias remitirían a las 18, cosa que podría ser cierta pero no anulaba la catástrofe que podía venirse, y de ahí, se fue a comer y quedó completamente incomunicado hasta las 19h y pico, cuando llegó, más de 2 horas tarde, a la reunión (de crisis) más importante de su vida.

Mazón es un asesino. No ha cogido ninguna pistola, pero dejar a tantos ciudadanos a su suerte sí es delito, pudiendo haber hecho tantas cosas, sobre todo cuando, estando él incomunicado, recibió avisos y asistencia por parte de muchas personas. No es que Mazón deba dimitir inmediatamente, es que el PP debería haberle cesado a él y a todo su equipo al día siguiente, pero no acabo aquí, porque Mazón debe ser juzgado y debe ir a prisión. Y el que no esté de acuerdo, no tiene ni puta idea de cómo funciona España, no piensa en su gente, no me merece ningún respeto, y por mí, puede parar de leer.

Pero el Gobierno sí debería haber hecho algo, por supuesto. Legalmente han hecho todo lo que debían hacer, que es proporcionar toda la ayuda que Mazón pidiera al instante, pero tú y yo sabemos que las excusas no bastan; desde el momento en el que Mazón envía la alerta a las 20h ya queda clarísimo que es un putísimo inútil y no está a la altura, por lo que el Gobierno debería haber tomado el mando y haber confiado en los expertos que sí conocen el terreno para delegar en ellos, quitándose así a un inútil al mando. ¿Acaso le han dejado hacer para que quede todavía más claro que es un inútil, a costa de las vidas de la gente? Ha quedado más que claro que Pedro Sánchez no tiene sangre en las venas y es un blando que no hace suficiente ni con la suficiente contundencia, y ya que los retrasados de la derecha le van a llamar dictador igualmente, debería haber hecho realmente el 100% de lo que estaba en sus manos, porque el pueblo valenciano estaba muriendo y ahogándose mientras el pueblo valenciano les rescataba y los militares llegaban pocos, y tarde.

No se puede jugar con las vidas de la gente. En momentos de crisis hay que darlo todo y todos a una, y los políticos se han dedicado a echarse culpas unos a otros (con la excepción de Óscar Puente), mientras los grandes empresarios se hacen ricos de las compras que los peatones hacían para donar a los que no tenían. Y me juego un dedo a que Mazón no alertó antes a la población por culpa de esos putos empresarios que tuvo a sus trabajadores obligados a trabajar pese a las alertas. Que se sepa, que no son tus héroes ni los de nadie, y Juan Roig puede arremangarse y venir a Alfafar a comerme la polla porque NADA de lo que haga va a tapar la explotación que sus trabajadores vivieron, incluso en Castellón, días después, con alarma a los móviles enviada desde la mañana y ellos currando igualmente a turno completo, expuestos. Ikea, Consum, DHL. Que no te engañen. Esa gente es la misma escoria que los políticos, sociópatas, sólo que en vez de éxito mediático, estos quieren el dinero.

Y la basura no acaba. Como si el pueblo no hubiese tenido suficiente, el mandril Alvise Pérez y su rata Vito Quiles siguieron enmierdando la situación, hablando de ropa donada que estaba siendo tirada en contenedores, cuando era ropa de los vecinos destrozada por el temporal, precisamente el motivo por el que la ropa donada era importante. ¿Cómo tengo que explicarte que son un cáncer, que no son patriotas y que sólo hicieron mal? ¿Y qué pasa con Iker Jiménez y el resto que esparcieron bulos para consternar a la población? La patria es el pueblo, y es el pueblo el único que se arremangó de verdad y puso su integridad en juego por la gente.

Patriota es el que ayuda a alguien, sea de la nacionalidad que sea, porque ayudando a los demás es como hacemos un mejor país, entre todos. ¿Es más patriota la rata de Vito Quiles que aquel hombre que, con el agua pasándole de la cintura, destrozó la puerta de cristal de una casa para poder abrirla y guarecer dentro a una familia que estaba desprotegida a la intemperie? ¿Qué me dices de los bomberos valencianos que lo dieron todo desde el primer momento, descolgándose de los helicópteros para salvar a la gente? O los que tendieron una mano y acogieron a la muchacha que se salvaba de la riada agarrada a unos cables en la pared.

En las zonas afectadas por la DANA impera el orden y la solidaridad. Nadie roba ni saquea, todos arriman el hombro y ayudan, y quien no está trabajando, está haciendo comida para los que trabajan. Podría haber sido una zona de guerra en la que todos se pegaran por las cuatro últimas migas, pero no ha sido así y ha sido gracias a todos los que el primer y segundo día tras la catástrofe se pusieron las botas de agua, dejaron sus casas y recorrieron kilómetros a pie sólo para ayudar a gente que no conocían. Ellos provocaron el efecto llamada antes de que se normalizara viajar allí a ayudar, ellos generaron en miles de personas la necesidad de coger el coche y viajar hasta allí, también. Siempre hay unos que empiezan una ayuda antes de que esa ayuda se viralice, antes de que estrímers de pacotilla como los asquerosos ElXokas y TheGrefg ayudaran a esparcir bulos y opinaran desde la comodidad de sus casas en vez de ir allí a ayudar, o antes de que los influencers fueran hasta allí para hacerse la foto y se fueran rápido.

Durante la disputa política, en la que Pedro Sánchez no desautorizó a Mazón y Mazón negaba la ayuda de fuera mientras el pueblo sufría, el pueblo hirvió de enfado. Los valencianos tenemos dentro un fuego que nos hace ser los personajes que somos, pero ese fuego, cuando se canaliza, da miedo, y hacía muchos años que no veía a los cerdos de la política tan aterrados. ¿Para qué quiere el pueblo al puto rey o al puto Presidente cuando los militares y el voluntariado de bomberos no llegaron de verdad hasta pasada la primera semana? Es más, ¿para qué les quieren, si en Paiporta, la zona más afectada, vino un séquito a limpiar corriendo la calle por la que luego ✨sus majestades✨ pasarían, sólo esa calle, y vino con un séquito que pudo haber venido a ayudar desde el primer día sin necesidad de que viniera ningún cargo importante?

El pueblo valenciano no odia al poder, y soy consicente de que varios ultras agitaron el avispero porque, en fin, escoria de ultraderecha, pero el pueblo valenciano sólo respeta a los que quisieron ayudar visiblemente desde el primer día, no a los que sólo venían a hacerse la foto pasada casi una semana de la catástrofe y en calle limpia, no fueran a ensuciarse. Tuvieron lo que se merecieron, y tuvieron poco. Espero que tanto los reyes como el Presidente reflexionen profundamente sobre lo que acaba de pasar, y espero que tengan bien presente que, si el pueblo ha de salvar al pueblo, ellos por definición no son necesarios. Y, como dijo Zoo hace 10 años en su canción Corbelles, ni el rey ni el Presidente lo seguirán siendo si les cortamos la cabeza.

Por eso siento rabia, impotencia, desolación, tristeza, consternación, pero también orgullo. Rabia hacia los políticos y empresarios con poder, impotencia por no haber hecho más y no haber sabido hacer más, desolación por todas las historias que se han perdido, consternación por el evidente abandono que han sufrido, parecido al de los ancianos de las residencias por parte de una Ayuso que, no entiendo cómo, todavía sigue al mando.

Ahora mismo tengo el recuerdo intrusivo de la bota entre la tierra, y el álbum de fotos que logramos rescatar en aquel taller. No sabíamos qué hacer con él, porque no había autoridades cerca, sólo había ciudadanos. Simplemente dejamos el álbum encima de un coche, y horas después ya no estaba, porque alguien que sí sabría qué hacer lo había movido. Tengo la esperanza de que algún día volverá a su dueño, gracias a una cadena de gente que fuimos haciendo lo poco que podíamos hasta que al final, las cosas se arreglan. He mencionado que siento muchas cosas, y la última es orgullo. Amo a mi pueblo, y ahora estoy orgulloso de él, de todos los voluntarios de España y de fuera (¡hasta de Canadá!), de todos los que pusieron su vida en peligro por salvar a otros el día de la riada, y también por todos los valencianos que se pusieron las botas y le dijeron al Gobierno que para el pueblo, el pueblo es lo más importante. Que, aunque ellos estuvieran bien, iban a ayudar a los que estuvieran mal, porque sí, porque así somos, porque nos ayudamos.

El poble salva al poble, y todos los que salvaron algo o a alguien sólo pudiendo perder, sobre todo los primeros que lo hicieron, son los héroes de Valencia. Un besi de fresi.