Videojuegos: Trilogía Mass Effect y Mass Effect: Legendary Edition.
Cuando empecé este blog, Mass Effect 3 era mi videojuego favorito. Adoraba tanto la trilogía que no la reseñé en mis comienzos porque, bueno, era perfectamente consciente de que estaba empezando en el mundillo de los bloguitos y mis reseñas iban a estar regular; Mass Effect se merecía mi nivel máximo. Poco después, llegó la Switch, llegaron Super Mario Odyssey y The Legend of Zelda: Breath of the Wild, juegos centrados en su jugabilidad mucho más que en su historia. Después llegó Hellblade: Senua's Sacrifice, y luego Hollow Knight."Para mí es especial, pese a las cosas que han envejecido peor y las secundarias que inflan las horas que dura. De hecho, nunca he reseñado esta trilogía como dios manda porque estoy esperando el momento especial que se merece (y acordarme)."
Poco a poco, la historia para mí empezó a pesar menos en los juegos, que comencé a ver como eso, juegos, donde la historia pasaría a ser sólo una excusa para una jugabilidad interesante. No recordaba a Mass Effect por una jugabilidad interesante, por lo que, aunque bancara su historia hasta la muerte y tuviese durante 11 años a Garrus Vakarian como mi avatar, la saga Mass Effect perdió fuerza en mi memoria, y el momento de una reseña como dios manda se veía muy lejano, porque el tiempo para escribir no me sobra.
Las circunstancias se dieron para poder rejugarlos acompañado de alguien que los experimentaba por primera vez, y qué bueno fue eso. Volver a indagar en su profundísimo trasfondo para guiarle como dios manda. Poder sentir todo sin la piedra desgastada de saber qué va a ocurrir. Tras ocho añazos haciéndome el remolón, ha llegado el momento de reseñar una de las trilogías más emblemáticas e innovadoras de la historia de los videojuegos, y compararla con su remasterización mientras hago malabares subido a un monociclo. Y encima, sin espóilers de absolutamente nada porque soy majísimo y quiero que tú también los juegues. Soy Carli Love, y esta es mi trilogía favorita de la Ciudadela los videojuegos.
Lo suelto sin rodeos: antes, los juegos de rol eran jugablemente aburridos. No es que los diálogos estuvieran por escrito, es que todo estaba por escrito, hasta descripciones de personajes y sucesos que tú mismo podías ver, en gráficos mierderos, pero se veía. El combate por turnos está guay, me mola, pero que el modelo de los juegos de rol se estancara en los combates por turnos también empezaba a oler a cloaca. Sus historias eran buenas, y cambiaban en función de tus decisiones, pero no eran dinámicas, su en-verga-dura tardaba en crecer y, resumiendo, no invitaban al gran público a ser exploradas.
Hasta que llegó papá Mass Effect en 2007. ¿Que decían los normis, que un videojuego de rol es aburrido? Éste va de pegar tiros y usar tus poderes en tiempo real como si fueras el Master Chief de Halo, siendo el primero en combinar así estos dos géneros. Todos los personajes tenían detrás a actores y actrices de voz para que les dieran vida, y encima se tomaban esas actuaciones muy en serio, siendo también los primeros en hacerlo, y su historia, profundamente cinemática y orientada desde el principio a que cumplas una misión importante, atrapa al segundo. ¡Es más! Su historia cambia según tus decisiones, pero ahora, tus decisiones se guardarán de un juego a otro a lo largo de toda la trilogía, algo en lo que, otra puta vez, volvió a ser pionero, al menos de forma digital y sin necesidad de meter el anterior cartucho.
Es importante que diga cuántas barreras rompió la saga ME porque el contexto lo es todo. Claro, después de Baldur's Gate 3 todo es más fácil y el rol ya no da tanto asco porque la tecnología oculta toda su ortopedia, pero que esto pasara en 2007 y viéramos un juego de rol más como un shooter con historia que un juego de rol, es una revolución. Supieron camuflar el riquísimo trasfondo histórico y cultural de todas sus razas, disfrazándolo de exploración y misiones secundarias. Y su sistema de decisiones hacía que convencer a un mafioso de que parara su actividad criminal fuera casi más divertido que convertirlo en rayador de queso. Es más. Hay jefes que puedes ahorrarte y vidas que puedes salvar a través de la boquita, algo que Baldur's Gate 3 ahora hace parecer sencillo, pero estamos hablando de su papucho, 15 años antes.
Jugando, subimos de nivel y desbloqueamos habilidades, sí, pero no tienes que leerte una novela corta cada vez que te pones a mejorarlas; son pocas, sencillas y diferenciadas. ¡Y también tienes equipo que equiparte! Pero no es una espada que te sube +5 de defensa y un 2% de resistencia al frío, sino que es un francotirador to wapo que mira cómo dispara, PUM, le he reventado la cabeza uajjajjjaj. Y si fueras uno de los puritanos del rol (lo siento), puedes pausar la partida siempre que quieras usar el coco y hacer un análisis estratégico de la situación, algo imprescindible en los modos altos de dificultad, y también puedes indagar en ciertos aspectos que, esta vez sí, te aumentan un 5% la estabilidad del arma.
Probablemente, lo que ME2 y ME3 ganaron en fluidez y en pulido, lo perdieron en ese elemento de rol, que aunque lo he estado criticando, creo que tiene una magia bonita cuando se usa en su justa medida. Poco a poco exploramos menos el mundo que nos rodea y atendemos menos a los personajes terciarios del juego y sus movidas, que pasan a ser una excusa para meter una sonda a un planeta por el culo, sacar un artefacto y devolvérselo sin más. Pues claro que me apetecía más pasear por ese mundo y oír a sus gentes, pero, por las características de la historia de las secuelas, entiendo que no lo hicieran así. Sobre todo si tienes en cuenta la trilogía como un todo, y vemos que el primer título ya hizo la labor de preparación adecuada para que los siguientes pudiesen ir más directos a la mandanga.
En ME1 se establece muy bien el mundo, sí, lo suficiente como para que entiendas el cuadro grande, pero te queden las suficientes dudas en detalles concretos como para seguir teniendo curiosidad. Cada raza tiene su cultura y sus formas de proceder, todas acorde a su fisionomía. Pero su otra gran fortaleza es la simpleza y redondez de su historia, donde todos los elementos clave se presentan durante la primera hora de juego sin que te enteres, y donde su magnitud, cuando crece, ocurre de forma que es obvia y al mismo tiempo es demoledora y épica. Su gran desventaja, no obstante, es que gráficamente es un dolor para los ojos, en el valle inquietante entre los malos y los buenos gráficos, y hay varias cosas en su jugabilidad que necesitan un pulido.
ME2 es ese pulido, donde los dineros de Electronic Arts (que acababa de hincar el diente en la nueva presa) se notaron considerablemente, teniendo en cuenta que las 3 entregas se estrenaron en la misma generación de consolas. ME2 es la oveja negra de la trilogía, el rebelde, con una paleta de color distinta, de naranja y óxido, que hace una gran labor a la hora de subvertir las expectativas y expandir su universo por la "cara B", dejándote al mando de un grupo de inadaptados. Donde antes visitabas los barrios pijos, la secuela se va a los callejones de las puñaladas, y ves la realidad cruda de ese universo tan bonito que te enseñaron antes. Es un cambio drástico, pero lo compensa teniendo, en mi opinión, la mejor misión final de toda la historia de los videojuegos. Su punto negativo, diría, es que como todo el juego consiste en preparar esa misión final, no hay grandes sorpresas, es algo repetitivo en estructura de misiones y el sacrificio que hace por la parte rolera no lo llena con una jugabilidad mega interesante, funcional, sí, pero no increíble. Está claro que sigue centrándose en la historia.
La capa de suciedad que aporta la segunda parte es importante en ME3, donde se combinan las dos versiones y, aunque el rollito y la paleta de colores vuelve a ser el azul y grises del primero, es, probablemente, el juego más duro de ver de los 3 y el más adulto respecto a sus temas. ME3 es el clímax, 50 putas horas de clímax, y resuelve lo presentado por ME1 y desarrollado por ME2 de forma espectacular y cinemática, pero a lo mejor le hubiera venido bien algo más de pausa para que pudiéramos sentir más íntimos los momentos íntimos que ocurren. Es una idea al aire. La historia de ME3, a no ser que reescribiéramos toda la trilogía, está hecha para ir a fuego.
Una vez entendido todo, la pregunta sería si compensa más jugar la remasterización que los originales. Los originales tienen el encanto de la época, pero no veo ningún motivo para jugarlos teniendo la Legendary Edition, y no sólo por el precio. Tienes los 3 juegos en el mismo sitio, con todos sus DLCs, donde la remasterización del 2 y del 3 es un pulido y a correr, pero en ME1 hicieron un trabajo buenísimo. Con unos gráficos actualizados y algunas correcciones en la jugabilidad, incluida la del cochecito espacial (que me dio un poco igual porque siempre fui fan), de repente tenemos un juego redondo con todo lo bueno y sin muchas de sus cosas malas. Encima, movieron algunos planos cosificadores hacia un par de personajes femeninos. Ojalá Bioware, la desarrolladora, hubiese aprovechado para poner la misma interfaz a los 3 juegos y darles más cohesión. Por lo demás, me pareció una buena remasterización, sobre todo porque lo pillé en superoferta por 5 pavos.
Se me llena la boca a la hora de hablar de Mass Effect, es normal. Es bueno recordar que esta saga fue pionera en muchas cosas buenas, pero también en cosas malas. Como mencioné antes, Electronic Arts estaba detrás de las secuelas, y se nota. Joder, básicamente es la responsable, ella sola, de todos los puntos negativos. ¿Te acuerdas de las lut boxes, esas tragaperras disfrazadas de cofrecitos que invadieron el medio durante los 2010s? Te presento a ME3, que fue pionero en eso también, en su modo multijugador. Los 2010s fueron también el holocausto de los DLCs, donde por cualquier puta basura te podían sajar 10 pavos y quedarse a gusto. Nunca he pillado la gracia a jugar una misioncita a sobreprecio, pero algunos son buenos, como La guarida del Corredor Sombrío o (el mejor) Leviatán. Otros, como los DLCs cosméticos, la basura de Llegada o el fánfic barato de Ciudadela, se los podrían haber ahorrado, y De las Cenizas, directamente, estaba en los archivos del juego, dentro del disco por el que habías pagado, pero EA bloqueó ese contenido para que tuvieras que pagar a parte por él.
Y ya que hablamos de DLCs y he comentado el de Ciudadela. Se nota bastante que me flipa Mass Effect, pero no es un elemento de mi identidad, ni me siento parte de su comunidad de fans. Digo esto porque, a ver, ninguna comunidad de fans tiene una media de inteligencia muy alta, pero no sabes la de mierda que le metieron al final de ME3, hasta el punto de que es ya un meme, y muchos fans dicen que ese no es su final, que su final es el final del DLC Ciudadela, donde hay una fiesta y todos los personajes son felices con un humorcillo rancio que desentona del resto de la trilogía. Gente, querer a los personajes es bonito. Quererlos demasiado para que sean estúpidamente felices... es infantil.
Pero a ver, el final. Entiendo que la gente se quejara, porque yo mismo terminé ME3 y fui directo a que por favor Google me explicara qué acababa de ver. ¿Que qué pasó? La puta de Electronic Arts, eso pasó. Obligó a Bioware a acabar su último y más ambicioso juego en sólo 2 putísimos años, con 2 cojonazos, y al final todo fueron prisas y explotación laboral, obviamente. Tenían poco tiempo y decidieron hacer 3 finales muy iguales para ahorrar tiempo, incompletos, por estar hechos con prisas. Los fans se quejaron mucho, y 2 meses después, con 2 cojonazos también, sacaron un final extendido con cinemáticas extra que narraban mejor qué pasa en el final y qué consecuencias ha tenido.
Mira, no voy a pedirte que te guste su final porque los gustos son como los culos y yo veo algunos culos que jamás querría comer. Mass Effect revolucionó el género del rol y básicamente fue el papu de Baldur's Gate 3, guardó tus decisiones para que siguieran importando a lo largo de una trilogía, creó al mejor bro de la historia de los videojuegos, a la chica azul con más parodias porno dedicadas, a una rana que es el científico modelo, y literalmente a una tía en traje de buzo, e hizo que los amáramos. No podía ser el pionero en todo, no teniendo a EA respirándole en la nuca. Sus finales actuales no son rompedores, pero son buenos, y lo digo en serio, son satisfactorios. Y, aun así, la gente, no sé si por el meme o por la tontería, todavía recuerda a la saga por el mal sabor del final, sin haberlos rejugado, sin haber vuelto a recordar, 14 años después, por qué estos juegos eran sus favoritos.
No soy el mayor fan de la jugabilidad de Mass Effect, pero, después de haberme convertido en una enciclopedia humana de este universo, me di cuenta de que esa chispa seguía existiendo y no fue fruto ni de la edad ni de su tiempo, que realmente eran así de buenos y rejugarlos no sólo igualó la experiencia, sino que la mejoró desde que, siendo un chiquillo de 18 años, Mass Effect fue el único juego (pionero, supongo) al que he aplaudido en soledad frente a la pantalla. Es especial. Por su calidad técnica, su historia, su universo, por tomarse en serio y también tomarse en serio la realidad en la que vivimos, donde la intolerancia y el racismo existe, donde existen los sexistas y los asesinos, donde puedes elegir ser todo eso, y aún así, ser el salvador de la Galaxia. Donde podemos aspirar a ser lo que hoy en día no nos atrevemos, o descubrir partes nuevas de nosotros cuando, un día, te das cuenta de que esa chica de rostro desconocido embutida en un traje de buzo morado está tremenda. ¿Es una experiencia para los que buscan una buena historia sobre todo lo demás? Desde luego. Pero Outer Wilds es lo absolutamente opuesto y se lo recomendaría igualmente a todo el mundo.
Muchos besis galácticos de fresis segadoras. Debería irme.











Llevo un buen rato ojeando tu blog y... a la mierda, que dedicación le echas a esto, se nota la pasión y me alegra ver que el perfil que me esta ayudando con el Hollow Knight sigue activo. Espero así siga. Gracias por tanto y perdón por tan poco.
ResponderEliminarCon esos mensajes tan bonitos es normal que siga escribiendo :) pues sí, el adulting me tiene muy ocupado, pero de vez en cuando rasco tiempo de donde no hay para seguir con mi bebé (este blog). ¡Qué guay que mis guías te ayuden! Para eso escribo 💪🏼💪🏼 dale durísimo a ese Hollow Knight
EliminarYa, el adulting es lo peor de la vida. Aprovecho que estoy desempleado para platinarme el HK, y ve, me encontré entretenimiento puro y duro de mis hobbies favoritos; la literatura y el gaming. Ojalá que la llamada del trabajo al que postulé no llegue pronto
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