Will Smith.


Desde que Will Smith se levantó a darle el sopapo a Chris Rock en la gala de los Oscars, no ha parado de haber revuelo al respecto. Titulares. Uau. Seguro que más de un periodista se la cascó viendo la gala pensando en la de semanas que estaría cubriendo lo mismo. Voy directo al grano y luego ya me explico: son todos una panda de subnormales. Will, Chris, Jada, el comité de los Oscars, la prensa más que nadie, y luego tú, si es que opinaste sobre el tema. Incluso yo lo soy, porque yo me posicioné en su momento a favor de Will.

Puede ser un poco raro que alguien apoye a un tío que, encima de reaccionar violentamente y en defensa de la damisela, lo haya hecho por un chiste, después de haber escrito esta entrada sobre la libertad de expresión en el humor. Estoy absolutamente a favor de la libertad de expresión en el humor, pero, como ya dije en aquella opinión, el único que puede decidir si un chiste ha sido gracioso es el público allí presente, en el momento exacto en el que se cuenta. Cuando nos metemos con un colectivo, como los hombres, o los judíos, podemos utilizar clichés para hacer gracia, pero son eso, clichés. Fácilmente puedes decir que tú, aunque seas hombre o judío, no entras en el saco. Incluso si entras, no se están burlando de ti, sino que están haciendo un chiste meramente impersonal.

Lo que pasa aquí es que Chris Rock se metió con la calvicie de Jada Pinkett, la mujer de Will, probablemente con buena voluntad. Pero hizo el chiste a una sola persona. Con nombre y apellidos. Teledirigido.


Bien, apoyé a Will en su momento, pero eso no significa que me parezca bien que diera la bofetada, creo que había muchas mejores maneras de solucionarlo, sobre todo por su propio bien. Lo que estoy queriendo decir al apoyarle es que no me parece ni un machista, ni un violento, ni un nada, al menos sin conocerle. Esas cosas pasan. A mí no me ha pasado nunca, pero me podría pasar pronto. Te calientas y le das, se lo merece, es lo que piensas. Y Chris Rock ha tenido la misma libertad de contar el chiste, e hizo bien si quería hacerlo, que Will para darle la hostia. Eso es así.

Hasta aquí se quedaría mi opinión, resumida en el tuit que ya escribí, de no ser porque entre que lo hice y hoy han pasado cositas. Vamos a hablar de su esposa tóxica.


Jada Pinkett Smith es un cuadro. Me parece que tiene virtudes muy destacables, tiene carisma, tiene garra para que las niñas se sientan inspiradas por ella, y tiene valores. Es una pena que casi todos sus peores defectos tenga que pagarlos Will.

Bueno, ya sabrás que Jada le fue infiel en un momento de debilidad matrimonial. Según Jada, ella es o poliamorosa o tiene la necesidad de tener una relación abierta, y ése fue el motivo por el que, en ese momento de debilidad, cayó en lo que a ella le hubiera parecido natural. El tema del poliamor y la relación abierta está bien, y está claro que Will ha accedido a abrirla para que ella esté feliz, pero, por lo poco que me ha dado por indagar, la gestión de Jada podría haber sido mucho mejor. Le puso la cabeza como un bombo. Hablaron horas, y horas, y hoooooooooras sobre lo mismo, sobre un tema tan abstracto que puede saturar si se abusa de él.


Pero la magia está en los pequeños gestos. Cuando Chris Rock soltó el chiste, Will sonrió un poco, seguramente porque todavía lo estuviera asimilando, y sólo Jada puso mala cara. La cámara corta ahí. No sabemos qué pasó, si se levantó porque le salió de dentro o lo hizo al ver la mala cara de su esposa. Lo más probable es que Jada no tuviera nada que ver con su reacción y que Will lo hiciera porque es otro retóxico que debía hablar en nombre de su chica. Lo que sí que tengo claro es que, si Jada se hubiera levantado y le hubiera abofeteado, no hubiera pasado nada. Pero hay más gestos. Por un cumpleaños, Will le grabó un documental a su esposa para que lo vieran ellos y los amigotes, y ella le dijo que era "una demostración de ego deplorable". Ahí es cuando hablo de sus valores, tiene convicciones, está bien. El problema está en cómo le sueltas el rapapolvo a tu pareja por algo que hizo de buena voluntad, por más ego que hubiese allí. Es la gestión.

Y, después de que el comité de los Oscars haya prohibido a Will la entrada al espectáculo por 10 años, Jada ha retirado el apoyo a su marido.

Se la ve claramente descontenta. Lo que yo digo es que su gestión del tema, como de tantas cosas, no es buena.

Personalmente, yo no necesito más datos. Después de cómo se gestionó aquella infidelidad y ahora que ella le ha dejado puto solo, no tengo ninguna duda de que, por más inspirador que pueda ser ese matrimonio, y por más buenas intenciones que tenga, tiene unos valores desordenados, con sándwiches podridos debajo de los colchones. No está bien que Jada hiciera público que quería tener una relación abierta sólo después de cometer la infidelidad. No está bien airear y comercializar todo lo privado que te ocurre. ¿Y el comité de los Oscars? Son unos blandos a los que les puede la presión, y son tan machistas como los tuiteros que gritan y ovacionan a Will.

¡Ah, machismo, esa bonita palabra! Desde la pandemia, hacía mucho que no escuchaba a las feministas más idiotas, pero oye, una parte de mí hasta se alegra de que aún sigan vivas. No cambiéis nunca, chicas, seguid con esa cultura de acoso.


No hay nada de malo en que tu pareja o tu amigo te defienda. No te limita la libertad, no te hace de menos. También es cierto que puede molestar, pero para eso está la comunicación, para ver los valores del otro y saber si le gusta ser defendido o lo considera condescendiente. Están bien las dos visiones. Y antes he dicho "tu pareja o tu amigo" porque pienso en eso, en alguien que te defiende, sea del sexo que sea, porque no soy un amargado que le gusta dar la vuelta a todo y ya cualquier hombre defendiendo a su mujer es un caballero andante heteropatriarcal. ¿Criticaríamos igual si Jada estuviera casada con una mujer y hubiese sido su mujer quien abofeteara? ¿Eso no sería homomatriarcado, entonces? Que a la gente le encanta sacar segundas lecturas que le hagan creer que su bilis está justificada. Que podría ser que Will fuera un machirulo, pero podría ser todo lo contrario, y ni tú ni yo, ni el tuitero en su puta casa, lo sabemos.

Tampoco es digno de ovación. Se comportó violentamente, eso no le quita la razón ni se la da, pero los puños enturbian todo. ¿El buen rollo? A la verga. Pero tampoco es para ponerse como Jim Carrey, que, aunque tuvo razón al decir que la ovación que recibió Will le dio asco, tampoco me parece que una galleta sea tan grande. Es algo más digno de lamentar que ninguna otra cosa.


¡Pero eh, eh, a ver, un momento esas tuiteras! Porque no me acaba de quedar claro. ¿Las hay que llaman machista a Will Smith, pero también las hay que se quejaron de que Jesse Plemmons no se levantara a defender a su esposa en la misma ceremonia? Aaaah, porque esa es otra. La presentadora Amy Schumer llamó a Kirsten Dunst "rellenaasientos", cuando tan sólo estaba nominada para una estatuilla. Muchos se quejaron de que su marido, que estaba ahí delante, no hiciera ningún comentario. Entonces... ¿en qué quedamos?

Lo único que tengo claro es que esta última gala fue un poco extraña y que hubo comentarios un poco jodidos. A ver si entendemos que este tipo de peleas pasan a veces, y no son peores por haber aparecido en televisión o que las haya hecho un famoso. Will y Jada tienen una relación turbia, el hombre se enciende rápido, pero tampoco se encendió de la nada. Ya está. Ni Will es más hombre por levantarse ni Jesse Plemmons es menos por no defender a su esposa. Todo es válido siempre que la pareja esté de acuerdo, y si Jada no lo está con la reacción de su marido, podría haberle quitado la razón pero siguiendo con su apoyo, criticando al comité por castigarle cuando sabe que no lo hará de nuevo, por ejemplo. Por mi parte, si Will me demostrara que va a dejar de hacer esa clase de espectáculos, no se me haría necesario castigarle. No sé, llámame violento si quieres. Pero qué esperas de un tío que llama subnormal a cualquiera sin cortarse un pelo, dice tacos y piensa que la gente políticamente correcta es una encorsetada reprimida. También considero que le habrían llovido los palos a Chris Rock si no hubiese recibido la hostia, pero la gente es tan subnormal que sólo defiende a la víctima "más grande" sin atender a razones.

¡Un besi de fresi! Nooooo, de fresi no. De galleta.

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